Si te interesa vender o ayudar a vender una propiedad que aún se encuentra a nombre del ex-cónyuge de tu cliente, o bien, deseas comprar un inmueble bajo estas condiciones, es importante que conozcas esta información para saber cómo proceder.

La pregunta es ¿Cómo vender correctamente una propiedad cuyo dueño la ofrece a muy buen precio pero cuenta con ciertos detalles, como por ejemplo, que ante el Registro Público aparece a nombre de otra persona que no es tu cliente?

Lo primero que hay que hacer es salir de la duda, identificando qué es lo que liga a tu cliente con el titular legal de la propiedad, y por qué dice que tiene derechos sobre el inmueble para poder venderlo. Entre un sinfín de respuestas, aquí es donde puede surgir el caso de los divorcios, y para saber cómo proceder, es necesario que conozcas los tres tipos de divorcio que existen:

1. Administrativo: este se lleva a cabo ante el oficial del Registro Civil. En este caso, no hubo hijos producto del matrimonio y el mismo oficial que los casó los puede divorciar, disolviendo la sociedad conyugal ante un notario. Ahí mismo, si cuentan con bienes entre sí, una de las partes puede ceder sus derechos sobre la propiedad a la otra persona. Esto es necesario protocolizarlo, para que no quede en una simple cesión de derechos sino que la propiedad legal pueda tramitarse e inscribir al nuevo propietario ante el Registro Público de la Propiedad. Recuerda que el dinero de quien vende debe ingresar a su cuenta bancaria, lo que implica que la propiedad debe estar a su nombre, por lo que es indispensable formalizar esta transmisión de propiedad.
2. Voluntario: aquí puede ser que haya familia e incluso existan menores de edad. En este caso, los cónyuges acuden con un juez familiar. Una de las partes puede ceder los derechos de propiedad a la otra, realizando un convenio judicial. Este convenio judicial, que viene siendo la cesión de derechos, debe llegar al notario para ser protocolizado, elaborar la escritura y poder inscribir el cambio de propietario ante el Registro Público.
3. Necesario: si ambos cónyuges no lograron llegar a un acuerdo, acuden al juez quien decidirá a quién corresponderán los inmuebles. Se elaborará un documento en donde quedará estipulada la propiedad o propiedades, el cual hay que llevar a la notaría para ser protocolizado, haciendo el cambio de propietario correspondiente ante el Registro Público de la Propiedad.

En los tres casos, la finalidad es que la propiedad aparezca legalmente a nombre de tu cliente o la persona que desea vender, para justificar el ingreso del monto a su cuenta bancaria y proceder legalmente a la venta.

Es importante recordar la Ley Anti-Lavado, pues si no se resuelve el asunto de la propiedad, no habrá forma de justificar ese ingreso. Es, también, muy importante conocer la ruta legal para regularizar cualquier propiedad que no esté en las condiciones idóneas para vender. Un consejo si te dedicas a vender: no promuevas propiedades sin conocer la ruta para regularizar y vender adecuadamente.

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Autor: Carlos Rodiles