Los marketeros dicen que en toda página de venta para un curso de inversiones debe de tener titulares con promesas de libertad financiera.

Uno que te enganche, que capte tu atención y deseo por comprar.

Puede que sea cierto, es más, hay mucho de cierto, porque los que invertimos, lo hacemos porque nos motiva la libertad financiera.

Pero en esta página, no he puesto ningún titular. Tampoco te prometeré la libertad financiera. Tu y yo somos desconocidos, y te hablaré con respeto. Con el mismo respeto como si nos conociéramos y estuviéramos frente a frente viéndonos a los ojos, como si fuéramos amigos o, al menos, nos cayéramos bien.

Bueno. La libertad financiera no es algo que alguien te de. Es algo que tu consigues por la persona en la que te convertiste.

Durante los últimos 7 años he recibido cada mes, decenas de preguntas sobre las inversiones de los remates bancarios o hipotecarios. He recibido decenas de historias de gente que la han defraudado, de dudas sobre cómo hacer una inversión confiable, quejas sobre lo difícil que es encontrar una buena inversión cuando se carece de conocimiento.

En esta página hay una historia de cuando trabajaba con inversionistas haciendo préstamos y recuperando casas como abogado, al margen de  que te inscribas o no, es casi seguro de que te ayudará en tus inversiones inmobiliarias.

Pero primero necesito ponerte en contexto. 

Veras.

El mayor obstáculo para que tus inversiones sean un éxito, no es la bola de defraudadores que hay allá fuera, o la falta de honestidad y transparencia de las personas. Sin duda estos son factores contribuyentes para que las personas realicen malas inversiones pero no son factores determinantes para multiplicar tu dinero haciendo buenas inversiones.

Existimos muchas personas que estamos capitalizando buenos negocios inmobiliarios a pesar de esos factores externos. Porque los factores externos no son determinantes. 

El factor determinante para el éxito de tus inversiones, eres tú mismo.

Recibo infinidad de comentarios en mis videos de youtube de personas interesadas en invertir en remates, donde me piden referencias sobre la empresa “XYZ” si son de confiar o no. 

!Y yo que sé de esas empresas!?… 

No soy el policía de los defraudadores de inversiones. En youtube comparto videos respondiendo a sus preguntas desde mi experiencia como abogado y empresario inmobiliario, no como policía de los defraudadores, !vaya ! que hay mucha diferencia.

“La verdadera inversión es aquella que se basa de un análisis exhaustivo, cuidadoso, que asegura primero no perder el capital y busca un rendimiento justo y coherente, siguiendo un proceso basado en el conocimiento.”

Las inversiones no se basan en recabar recomendaciones en internet. La inversión NO ES igual a especulación. Para tener éxito en las inversiones requieres conocimiento y un análisis cuidadoso.

Si a ti te da flojera aprender, invertir tiempo siendo diligente y cuidadoso para hacer una inversión exitosa, yo no te puedo ayudar, este curso no es para ti y puedes dejar de perder tu tiempo aquí.

Pero antes te digo, que en las inversiones, lo que es cómodo, rara vez es rentable y no deberías invertir tus ahorros en este modelo de los remates hipotecarios. Aunque puedes hacer con esta información lo que quieras.

Pues bien, ya nos estamos entendiendo.

El éxito financiero empieza con una educación financiera sólida. Cosa que no nos dan en la escuela. Y hoy más que nunca ha tomado importancia tomar responsabilidad nosotros mismos. En los últimos años hemos sido testigos de cómo grandes empresas internacionales dejan de existir de la noche a la mañana.

De la misma forma muchos trabajos en los siguientes años van a desaparecer. El mundo está cambiando muy rápido y con la llegada de la inteligencia artificial las cosas pueden moverse más rápido. Así que para multiplicar tus ahorros en los bienes raíces y consolidar un patrimonio sólido, requieres primero invertir en ti mismo para aprender. 

El conocimiento hará que deje de ser una dificultad el poder diferenciar fácilmente las verdaderas oportunidades de las ofertas fraudulentas. 

Las oportunidades están por todas partes, solo necesitas estar preparado con los lentes adecuados, que te permitan reconocerlas y así poder aprovecharlas.

Segundo.

Al principio te comente de una historia de cuando trabajaba con inversionistas haciendo préstamos y recuperando casas como abogado…

Te cuento.

Por allá del 2010, uno de mis clientes inversionistas, le prestó a Pepe 150,000 pesos. Nuestro modelo de negocio era hacer préstamos a personas que tuvieran una propiedad con la que pudieran garantizar el pago de ese préstamo. Lo que se conoce como garantía hipotecaria. Así como prestan los bancos.

Sigo.

Este mentado Pepe, decía ser el dueño de una casa que no estaba a su nombre, estaba a nombre de su cuñada, a quien llamaremos Laura.

Como la propiedad estaba legalmente a nombre de Laura, accedimos a realizar el préstamo, pero a Laura. Ella debía de firmar una escritura notariada (cosa que hizo) donde asentara que ella dejaba en garantía hipotecaria esa casa a favor de mi cliente inversionista. Y ya una vez entregado el dinero a Laura, si se le daba el dinero a Pepe o se lo gastaba era problema de ella.

Laura era legalmente la propietaria y deudora y Pepe era de hecho el propietario y deudor. (esto lo explico más a profundidad en mi primer libro).

Y fue así que al pasar varios meses, el vivales del Pepe, dejó de pagar los intereses mensuales del préstamo y evidentemente tampoco hacía pagos de abono del capital (es decir, de los  150 mil pesos que pidió).

Por lo que tuve que demandar a la deudora legal, es decir a Laura, por la vía especial hipotecaria, exigiendo el pago de la deuda y si no lo hacía, le sacaría a remate la casa que dejó en garantía.

Cuando se le notificó de la demanda a Laura (emplazamiento), se deslindó de responsabilidades y dejó asentado con el actuario que ella no tenía nada que ver con esa deuda y que la casa era de su cuñado.

No contestaron la demanda, se fue en rebeldía, inmediatamente pedí la posesión de la casa y la sentencia. Mas cuando fuimos a tomar posesión de la casa (en calidad de depositarios judiciales), nos encontramos que ahí vivía una familia. Al preguntarle la actuaría en calidad de que estaban viviendo en esa casa, ya que tenían de deshabitarla, respondieron:

La casa se la compramos al Pepe por 500,000 pesos. Mostrando un contrato privado de compraventa con él. Esta familia le había pagado medio millón de pesos a una persona que no era el dueño legal de esa casa, por lo que ese contrato no tenía ninguna validez. Y tampoco se habían percatado de que la casa estaba hipotecada y que, debido a esa hipoteca, nosotros nos encontrábamos afuera con una orden de desocupación emitida por un juez.

Esa familia había hecho una inversión sin saber las cosas básicas  que necesitaban saber para invertir su dinero en bienes raíces. Para muchos, es una simple compra de una casa, ¿qué tan difícil puede ser?

Utilizaron sus ahorros en una casa que tenía deudas hipotecarias, sin saberlo. Deudas que estaban garantizadas con esa casa. Mi cliente contaba con un derecho superior al de ellos, porque tenía una escritura pública de la hipoteca, inscrita en el Registro Público de la Propiedad, celebrada y firmada por la dueña legal de la casa. 

Por su parte, esa familia sólo tenía un contrato privado celebrado con una persona que no tenía legalmente ninguna relación de propiedad con la casa. Tenía una relación de hecho, pero no de derecho.

Por no saber cómo se compra una simple casa, esta familia perdió sus ahorros, perdió medio millón de pesos (Aprox 930 mil a mayo de 2024, según el calculador de inflación).

En los negocios de bienes raíces, te van a defraudar si tu compras las casas, los terrenos, los locales, las bodegas etc. Así como le pasó a la familia que “compró la casa”, le dieron las llaves y se metió a vivir en ella.

Pero después la desalojamos, perdiendo la casa y su dinero.

¿Por qué?

Porque en bienes raíces lo que compras son, ¡los derechos! no las casas.

Compras los derechos que se materializan sobre las casas (o cualquier inmueble obviamente). Hay reglas para saber quién tiene mejor derecho sobre los inmuebles.

Los derechos a los que me refiero pueden ser, como el derecho de propiedad, el derecho hereditario, derecho de posesión, derecho de fideicomiso etc. Y para fines de este curso, el derecho hipotecario, el derecho litigioso, el derecho de adjudicación, derecho de pago, etc.

Si entiendes el negocio de la deuda, en su parte legal, no te defraudaran. Si entiendes el negocio en su parte, financiera, comercial y física, podrás multiplicar tu dinero.

Y de eso se trata el curso. De que entiendas esas 4 partes, los procesos y sus sistemas. Para que puedas entender la película completa, no pedacitos de ella. Y de esa forma, si te enfocas, eres disciplinado y consistente, puedas multiplicar tu dinero y generar riqueza.

Por otro lado, en los siguientes 3 años, junto con un cliente inversionista voy a invertir más de medio millón de dólares en este negocio de la deuda como lo denomino yo en mis libros. En este curso vas a aprender exactamente los pasos de cómo vamos a invertir ese dinero.

Cuando éramos niños nos daba miedo en la noche ir a los cuartos oscuros de la casa de la abuela. La oscuridad, revela la falta de claridad. La falta de claridad nos produce miedo.

El miedo es el mayor obstáculo para alcanzar nuestras metas y deseos. Disuelve el miedo a las inversiones, enfréntalo y supéralo, obteniendo claridad  y un mapa de conocimiento de cómo se hacen estas inversiones.

Se que probablemente te estés diciendo que, tu no eres inversionista inmobiliario, que es muy complicado y que eso apenas si fueras abogado, que realmente tu eres __(tu profesión)___. Déjame decirte que yo no nací sabiendo. Nadie nace sabiendo nada. Yo era antes mecánico y aprendí. Un socio inversionista que hizo mucho, mucho dinero, era psicólogo y era empleado de recursos humanos de una fábrica.

Confía en ti, tú también puedes aprender, mi objetivo es que este curso te de los recursos para que hagas tus inversiones como experto.